Wind, Talk to Me  (2025) de Stefan Djordjevic

“Profundamente humana”

Sebastián Francisco Maydana

Stefan escucha a los árboles, a la tierra del bosque, intenta escuchar al viento. Su búsqueda telúrica tiene un objetivo evidente, que es reparar aquello que se rompió cuando murió su madre. Por eso, cuando sin querer atropella una perra, intenta hacer todo lo posible para “repararla”, y va a dar todo de sí para que Lija se recupere y viva una vida plena. Aún hay otra cosa que quedó inconclusa con la muerte de su madre. En ese momento, Stefan estaba filmando una película que la tenía como protagonista. Aprovechando el encuentro con toda su familia en ocasión del cumpleaños número ochenta de su abuela, Stefan cree que terminar la película es justo lo que necesita para que todo vuelva a estar bien, pero en ese plan choca con la apatía de los demás personajes, que son los miembros de su familia. No puede culparlos. Después de todo, cada uno procesa el duelo como puede.

En Wind, talk to me se superponen dos tiempos: antes y después de la pérdida de Neca, la madre. Más allá de su presencia en las escenas del pasado, el director (el propio Stefan) hace difícil adrede distinguir cuándo estamos en un momento y en otro, poniendo en perspectiva el alcance de esa tragedia. Paradójicamente, esto no la minimiza, sino que, por el contrario, hace más humanos a los personajes. Esta es una película profundamente humana, cuyo mérito principal es el de ser personal y a la vez universal. Con múltiples guiños al cine de Lucrecia Martel, Djordjevic transforma un drama familiar privado en una historia atractiva para un público amplio, y lo hace a partir de la operación engañosamente simple de poner la cámara en el lugar adecuado.

La película del Stefan personaje se superpone con la del Stefan autor, y mientras que la primera es boicoteada por casi todos los familiares que, voluntaria o involuntariamente, aparecen en ella, la segunda triunfa precisamente porque se burla de todos esos inconvenientes. De esta forma transmite algo de esa ingenuidad del director primerizo que hace una película en primera persona porque le falta mundo para pensar otras historias, pero lo hace desde un lugar mucho más maduro. Es evidente que el hecho de haber filmado esta película y todo lo que sucedió en el medio fueron una serie de experiencias transformadoras que le dieron una sabiduría que supo aprovechar, logrando una obra bella y reflexiva que sabe seducir al espectador. Por suerte, su madre le enseñó a escuchar al viento, a estar abierto a lo que éste le sugiere, y a aprender de ello.

Titulo: Wind, Talk to Me 

Año: 2025

País: Serbia

Director: Stefan Djordjevic