Purple Sea (2020), de Khaled Abdulwahed y Amel Alzakout

“Ningún lugar a donde ir”

Por Belén Paladino

Una imagen borrosa, con poca definición. Una cámara en movimiento constante, que no puede encontrar un punto fijo de apoyo, porque en el mar no hay manera de hacer pie. En de Purple Sea la cámara se vuelve cuerpo, es el cuerpo de la directora siria Amel Alzakout luchando por mantenerse a flote en medio de las aguas que separan las costas de Turquía de Grecia. 

Se trata de una cámara-cuerpo que no es externa a la situación, hay una concordancia entre el modo de registro y la situación trágica que experimenta la directora junto al resto de sus compañeres de viaje. Su potencia radica en esa cercanía, en ese desgarrador registro directo sumergido entre el azul del mar y el naranja de los chalecos salvavidas. Ese espacio intermedio entre ambas costas, entre un pasado difícil y un futuro incierto y no menos doloroso. 

Las imágenes se entrelazan con la voz en off de Alzakout que narra sus sensaciones, sus recuerdos y sueños. Sus pensamientos en medio del mar están dedicados a su pareja que la espera en Berlín. En un momento donde el futuro se vuelve algo débil y difuso, la palabra y el pensamiento se tornan vitales, ayudan a mantenerse a flote. Mientras ve las montañas a lo lejos se pregunta: ¿cómo llamaremos a nuestra hija? 

Purple Sea es un testimonio en primera persona que se vuelve colectivo. La voz de su directora es también la voz de quienes la acompañan en el viaje. Es la realidad cotidiana de miles de personas que se ven forzadas a abandonar sus países de origen en medio oriente y África en busca de un futuro mejor. Es la prueba de la indiferencia de los países europeos que dejan librados a su suerte a náufragos en el mar- pero no son indiferentes a la hora de intervenir de manera directa o indirecta en los conflictos de la región- Alzakout y el resto de los tripulantes estuvo cuatro horas en aguas abiertas antes de ser socorridos, pero antes de eso han sido fotografiados desde un helicóptero. La directora se pregunta dónde terminarán esas imágenes, cómo serán llamados: ¿refugiados, criminales, víctimas? 

Por lo pronto sabemos que las imágenes de Alzakout ayudarán a comprender una realidad que es ignorada por Estados como decisión política, minimizada por medios de comunicación y que muches prefieren no conocer porque nos enfrentan con el lado más oscuro de nuestras sociedades. Alzakout apuesta a la pantalla de cine, es a través de ella que los desplazados se volverán visibles. Es un acto de justicia con los desplazados en ambos lados del mar⚫

Titulo: Purple sea

Año: 2020

País: Alemania

Director: Khaled Abdulwahed y Amel Alzakout