“No se van, están llegando”

Por Ian Quintana.

Playback, ensayo de una despedida (2019) es una obra que en sus breves 14 minutos logra transmitir emociones intensas mientras construye una mirada melancólica sobre la vida y la lucha atravesada por la comunidad trans en los años posteriores a la dictadura, en la provincia de Córdoba. En ese contexto, conocemos a La Delpi, La Gallega y La Colo, tres artistas que fundaron juntas el colectivo Kalas. La Delpi, única sobreviviente del grupo, nos cuenta su experiencia de vida y los sueños y deseos de sus compañeras, así como también la forma en que murieron. Con ella hacemos un viaje nostálgico y por momentos angustiante a su pasado para generar una nueva despedida a sus amigas, la despedida que se merecen. 

En pleno apogeo del SIDA, las artista trans de Córdoba debieron encontrar una forma de expresarse mientras escapaban de la represión policial, la condena social y de una enfermedad que se esparcía por el mundo de forma letal y misteriosa. El proyecto de Agustina Comedi explora la historia del colectivo Kalas utilizando material encontrado, al igual que en su ópera prima El silencio es un cuerpo que cae (2017). A partir de ese material se cuenta la historia del grupo y la organización de los shows clandestinos que realizaban en departamentos o centros under como La Piaf. Con una voz dolorosa pero segura, áspera y nostálgica, La Delpi narra su vida y las de sus compañeras junto con las imágenes de archivo. En sus palabras se revela la importancia de las actividades teatrales como vehículo de reflexión y expresión personal, así como la creación de nuevos vínculos entre personas que compartían el mismo sentir frente a la existencia. Se elaboran ideas sobre la muerte y la trascendencia a partir del imaginario colectivo, un imaginario que nace de la resistencia de la comunidad trans y del apoyo entre sus integrantes. 

Las obras teatrales, los vestidos coloridos y los playbacks se transformaron en la manera de resistir en un mundo que constantemente ha rechazado nuevas identidades y formas de experimentar la sexualidad. A partir de la reelaboración de este material de archivo encontrado, Agustina Comedi da una nueva voz al colectivo Kalas y permite elevar y potenciar su discurso, generando también un manifiesto de resistencia y visibilización, un canto al amor y a la amistad en una población frecuentemente excluida. El cine se transforma así en el actual vehículo de resistencia. La Delpi logra despedirse de sus compañeras y gracias al cortometraje generar un desenlace diferente en sus historias. Pero el proyecto también abre una puerta, da la bienvenida a una nueva manera de entender las disidencias sexuales, fortaleciendo vínculos e ideas sobre las variadas formas de experimentar la vida.