Perla  (2025) de Alexandra Makarová

“El sol del hogar”

Por Kiara C. Warmerdam

¿Cuánto puede arriesgar uno por recuperar un segundo de lo que fue su vida antes cuando fue obligado a abandonarla? 

Perla vive en Austria en 1981, con su hija Julia, tras escapar de la Checoslovaquia ocupada por la Unión Soviética en 1968. Se ve obligada a volver tras la llamada de Andrej, padre de Julia, quien ha salido de la cárcel -a la cual entró en su intento de escapar con Perla- y quiere conocer a su hija. Con la excusa de que tiene cáncer, logra convencer a Perla de llevarla junto a su marido, Josef. 

Podemos pensar que la película se divide en dos partes, Austria y  Checoslovaquia, donde formalmente la diferencia es muy grande. Ambos lugares representan dos cosas diferentes para la película, por lo cual entendemos que hay una afirmación muy grande de parte de la narración. Si bien el personaje de Perla no distingue muy bien qué es lo que le pasa con su país natal, volviéndose indiscernible muchas veces lo que es realmente su hogar, la película nos deja muy en claro cuál es la diferencia. En Austria está la luz del sol que pega en el vaso de agua de Josef, sus pinturas, la música, las clases de piano de Julia; hay algo de los detalles, los pies en la cama, lo individual y lo íntimo que aparece en las imágenes que retratan Viena. En Checoslovaquia, en cambio, no hay un día soleado pero sí neblina, la cámara casi que se esconde de ser vista cuando recorre las calles de Košice, siempre a la distancia mostrándonos lo contrario a la intimidad, lo colectivo. Las imágenes se tornan mucho más abiertas en cuanto al espacio que habitan y engloba a la comunidad que vive allí.

El único momento que nos da entender que hay algo que se traslada de Viena a Košice es en el hotel, que funciona como punto medio en los dos lugares, donde a Julia le da la luz del sol mientras observa las flores puestas como centro de mesa en la sala de desayuno. Ahí es donde la película nos dice que Perla empieza a confundirse. Es un retrato muy complejo y profundo sobre decisiones que pueden implicar muchas complicaciones para todos los personajes. ¿Qué tan dispuesto puede estar alguien a aguantar por amor? El personaje de Josef se somete a demasiados riesgos tanto para él como para Perla, aunque no pueda verlo, y Julia, cuya mirada tiene un peso mucho mayor del que su madre logra percatarse.

La película se encarga de construir Checoslovaquia a partir de los horrores y secuelas que circulan, no solo en Perla, sino en la comunidad. Por un lado, la cuestión del hambre y la comida. Hay un momento particular donde Andrej, Josef, Perla y Julia salen a comer. Perla pide comida tanto para que Julia pruebe como para ella poder volver a degustar. Es devastador ver como los propios ciudadanos se violentan al ver que ha pedido “comida de más” , mismo no quieren servirle extra, y se ven obligados a irse del restaurante. Hay un resentimiento que se da hacia aquellos que son de afuera, específicamente a los que logran salir. Ese resentimiento se conjuga con otro elemento que trabaja la película que es la mujer objetivizada, una máquina para tener sexo y parir. Vemos que para poder escapar es violada por dos jóvenes; en su vuelta cuando llega al hotel otros dos, en una especie de juego para ellos, la hacen agacharse para observar su cuerpo en diferentes posiciones; hacia el final participa de nuevo en un juego para hombres, que pertenece a su pueblo natal, donde la hacen pasear en contra de su voluntad, y muy violentamente, antelos ojos de quienes habitan el pueblo. El resentimiento no sólo está en los habitantes, tanto en los que la conocen como los que no, sino especialmente en Andrej. Su rencor es muy grande, quiere que se quede, se la coge, tira y arruga su dibujo, la delata ante los juegos crueles del pueblo y finalmente la entrega ante las autoridades quienes la arrestan.

Ahora bien, todo esto se articula alrededor de Perla quien, a pesar de todos estos elementos horrorosos, igualmente elige quedarse. Si la película puede distinguir entre lo que es un lugar y el otro, entonces Perla puede que también, pero no le importa. El peso del hogar es tan importante que su juicio es guiado por esa búsqueda de sentimiento de pertenencia; son las cenizas de sus padres, la muñeca de Alicia, un beso de quien supo amar, una amiga casi hermana que no la deja pasar a su casa y le reprocha no haberla llevado hasta Viena. Es capaz de agotar la paciencia de Josef, dejar que se lleve a Julia y que ésta la odie, con tal de volver dos segundos. En ese sentido la película es muy cruel, dado que todas sus decisiones y descuidos son los que la llevan a ser arrestada. Arriesga su vida, su hija, su esposo y todo lo que pudo construir, por estar efímeramente un momento más. Pierde diez años de su hija y su vida, por tocar la tierra de su pueblo natal. Creo que la película no le echa la culpa, dado que no hay cosa más humana que anhelar aquello que fue nuestro y especialmente la vida que Perla fue obligada a abandonar, pero sí retrata la crueldad de aquellos tiempos sin escrúpulos. Propone un personaje que se resiste, porque sí intenta resistir a lo que se ha convertido su antiguo hogar, pero finalmente pierde ante el extremismo de aquel tiempo. Solo diez años después, en el 90’ , volverá a escuchar a su hija tocar el piano.

Titulo: Perla

Año: 2024

País: Países Bajos

Director: Alexandra Makarová