1

Prefiero no meterme, dice el director. No quiere agua en sus botas. La curiosidad del ornitólogo que le invita a adentrarse encuentra un límite en el director que prefiere mantener una distancia. ¿Qué estará pensando?, se pregunta más tarde sobre un hombre de espaldas. No me animo a preguntar, dice, como si el no animarse también tuviera su función poética. Como si la distancia fuera importante. No saber de más. No resolver la ecuación. Hay una curiosidad que mueve a esta mirada a abrirse camino por La Pampa y encontrarse con personas curiosas. Curiosidad por los curiosos. Pero no sabemos bien adónde apunta esa curiosidad que mueve a la película. La excusa será seguir las huellas de Hudson, sólo para darse cuenta de que Hudson borraba sus huellas. Quemaba sus manuscritos y sus cartas, se iba. No quería volver. ¿Por qué?

2

Es como si la película buscara una pregunta más que una respuesta. “Cada uno escribe, aun sin quererlo, la autobiografía que le sale.” ¿Cómo escribimos lo que somos? La identidad como una construcción imperfecta y despareja. Don Borges, como un doble de su nombre, aquel otro escritor que soñaba mapas totalitarios, construye la maqueta de todo lo que vivió. Un hombre de más de noventa sostiene un proyecto imposible. Usted es peón de dios, le dice al director: condenado a su arte, tiene que filmar. ¿Qué nos mueve a filmar? ¿Qué nos mueve a crear? Si la necesidad busca una cosa, el deseo (la curiosidad) busca. Sólo busca. De ahí, de esa búsqueda sin objeto, o con un objeto difuso, y múltiple, inquieto, nacen estas películas. Películas inclasificables. El poeta como un detective que busca no resolver, abrir filamentos. En Citizen Kane, el periodista es un detective que busca la clave final. Policial que excita y define. Y la historia del cine, su identidad, tan apoyada en esa obra monumental, si se quiere, esencialista. Aquí, en este anti-policial, las respuestas huyen por una Pampa imposible.

3

No sé adónde hacer pie, dice el director de este viaje sin norte, o con un norte movedizo, una brújula nerviosa. Al inicio de la función, nos dice a los espectadores que le interesa ver qué nos pasa con la película. Qué vemos, qué sentimos. Puede sonar falso, dice en la conversación posterior a la proyección, pero de verdad yo no sé qué película hice. Los espectadores, y no sólo en este tipo de experiencias más abiertas, estamos ahí para arrimar respuestas posibles a esa gran pregunta. ¿De qué trata esta película? ¿Adónde va? ¿Qué quiere? Hudson mira un cuadro de la peste, pero mira más a los espectadores del cuadro: me impactó la pintura, dice, pero más los espectadores. La película como un mapa descalibrado que el espectador tiene que aprender a usar.

4

Quiero hacer una película subjetiva, se dice en una charla con Javier, su compañero cineasta. ¿Es ésta una película subjetiva? ¿Qué significa eso? Si bien hay un yo que organiza una suerte de viaje, o investigación, el despliegue de esta subjetividad está dado por los objetos a los que da su atención más que por las emociones o las reflexiones de un interior que acaso no exista sino como entidad organizadora de exteriores. En todo caso, las reflexiones son parte del paisaje. Un pájaro más. La identidad, definida por lo otro. Una subjetividad objetiva, una objetividad subjetiva. Lo que nos llama la atención nos va definiendo de un modo esquivo. La identidad como una huella que se va borrando a sí misma.

5

Vuelve la democracia y salen a filmar. Filmábamos sin ton ni son, dice, sólo teníamos la intuición de que había que mezclarlo todo, como en un sueño, un sueño en el que Javier arma un nuevo mix con cosas de una caja de un desconocido, “como si todavía estuviera tratando de hacerme entender algo.” ¿Qué es lo que hay para entender? ¿Podemos cerrar la pregunta? ¿Es la Pampa (o la Argentina) un espacio de tensiones y paradojas? Seguir los pasos de Hudson es otra forma de preguntarme por la Argentina, se dice, la lucha por el lugar de pertenencia, la tensión entre dos mundos, la Pampa tiene tantos significados como la patria, y a la vez es un vacío. ¿Es la identidad una suerte de vacío? Un sistema de relaciones, de relatos, elementos que se entretejen, imágenes y sonidos que disparan asociaciones y multiplican los sentidos, el juego del montaje. La identidad como un montaje. Pista de baile para las operaciones combinatorias de la poesía.