Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.

Entrevista a Itonje Søimer Guttormsen, directora de Gritt

Entrevista a Itonje Søimer Guttormsen, directora de Gritt

Por Mauro Lukasievicz

¿De dónde nace la idea de esta película en donde una joven parece luchar contra el mundo para poder exponer sus ideas artísticas?

La idea inicial era la historia de una mujer solitaria pero disuadida con una fuerte vocación de marcar la diferencia en el mundo, un mundo que la aliena, pero que termina alienando también a su entorno, así atraviesa una etapa de radicalización. Esto fue hace 12 años. Pero luego tuvimos la masacre de Anders Bering Breivik y tuve que poner el proyecto en hielo, que tenía algunas similitudes, no en ideología o resultado, sino en el arco de su batalla para manifestarse. El hecho de que el arte se convirtiera en el medio de su mensaje llegó más tarde. Así que nunca lo vi como un retrato de una artista, pero puedo entender si la gente lo hace.

Hay un uso de la cámara que parece acompañar a la protagonista en cada una de sus sensaciones, mediante movimientos rápidos o zooms inesperados. ¿Por qué decidiste filmar de esta manera?

Patrik Säfstrøm y yo queríamos crear una especie de lenguaje para los nervios. Esta visión también se aplica al diseño de sonido, realizado por Erik Ljunggren. El estado mental de Gritt dicta el encuadre, los movimientos y el tiempo en gran medida, pero sin estar “en su cara” todo el tiempo. Queríamos contrastar eso con escenarios más neutrales, especialmente cuando intenta conectarse, como cuando presenta su proyecto para Lars Øyno de Grusomhetens teater, o prepara la cena a un amigo de la infancia en los suburbios. Iba a ser un tira y afloja de escena en escena. Filmamos en diferentes períodos a lo largo de 3 años, comenzando con una black magic pocket y un equipo de tres personas hasta llegar a un aparato de producción más extenso. Mezclamos formatos y herramientas, desde handheald hasta Steadycam, Gumbo y 16 mm. Incluso hemos tenido otro fotógrafo disponible por si Patrik no estaba accesible. Pero nunca nada fue al azar; cada detalle fue planeado a fondo y surgió de cada capítulo del viaje y el estado de ánimo de Gritts. En Retrett colocamos una black magic pocket con lente de 16 mm y con una cámara firme seguíamos a Grittt, yo apuntando o saludando excesivamente, Patrik jugando con el zoom. remoto, forzando direcciones diferentes a las de Egil (cineasta y fotógrafo que también trabajabó en Gritt y, a veces, reemplazaba a Patrik) para hacer esta sucesión, y debido a que la lente y la cámara no encajaban se produjo esta perturbación que realmente disfrutamos. Así bailamos como un troll de tres cabezas en busca de Gritt o Birgitte, que se metía en todo tipo de situaciones. Muy divertido.

Podría decirse que en el cine hay una falta gigante de personajes solitarios o incomprendidos a los cuales la sociedad menosprecia artísticamente. ¿Pensaste en algo de esto al momento de crear el personaje?

Sí, ¡es algo que no recuerdo haber visto! Y también no recuerdo ver a mujeres que luchaban por algo más que amor o por proteger a su familia. Esto no está en la agenda de Gritts, y quería mostrar cuán urgente puede ser una ambición o un llamado para alguien, cuando su causa es más grande que la vida misma. Por supuesto, se puede decir mucho sobre el bienestar o la condición de Gritt o sobre problemas psicológicos, o incluso sobre sus antecedentes, pero no quería resaltar eso, y me niego a que ella sea una víctima; ella es su propia fuerza y esa fuerza la lleva a extremos y páramos donde pueden surgir nuevos conocimientos y poder.

¿Cómo fue el paso al largometraje después de tu debut con el corto Retract, en el cual ya tocabas algunas de las ideas de Gritt?

Dado que mi idea inicial en 2009 era un largometraje, con Gritt la necesidad de contar una historia larga fue lo primero. Pero recién terminaba de cursar la escuela de cine y sin un productor ese largometraje era demasiada ambición, bueno igualmente supongo que estaba en un lugar no muy lejos de Gritt. Especialmente porque no quería hacerlo de la manera clásica, quería trabajar de manera más intuitiva, exploratoria, pero no había podido desarrollar eso en la escuela de cine, donde tenían este modelo del triángulo de acebo de Productor, escritor y director; un modelo que podría adaptarse a algunos pero no a mí. Entonces, después de mis primeros rechazos del FilmInstitute, me senté en la búsqueda de nuevos modelos, involucrándome en proyectos con artistas visuales y gente del teatro, un lugar en el que siempre me sentí más natural en términos de procesos artísticos, y que resultó en un grupo de actuación donde investigamos en lilitismo. Entonces ya era hora de aplicar mis fundamentos en el mundo del cine, ya que en el fondo de mi corazón amo este hermoso medio que puede contener todas las demás formas de arte. Y por eso llegó el cortometraje Retrett que para mí fue una especie de último intento, que hicimos con muy poco dinero bajo el lema “¡Más confianza, menos seguridad!”. Retrett recibió muchos elogios y para mí fue un gran alivio haber encontrado un método en el que podía prosperar artísticamente. Pero pasar de eso a obtener la confianza, los medios y el poder para hacer un largometraje… ¡Fue un juego completamente nuevo! Luego tuve que enfrentar mi paranoia para con los productores, lo que me llevó una maestría y algo de terapia poder superar. Pero estoy muy contento de haberlo hecho, de lo contrario, no habría estado aquí. Maria Ekerhovd y Mer Film se arriesgaron conmigo y han alentado mi visión en cada paso.

En Gritt, al igual que en Retract, la protagonista fue interpretada por Birgitte Larsen, ¿cómo es esta sociedad? ¿Planean seguir trabajando juntas?

Conocí a Birgitte cuando actuó en una de mis películas en la escuela de cine, y fue un clic inmediato. Tiene un sentido del humor asombroso, y una visión particular del tipo de mujer que quería retratar, dándole un factor extra en cada ocasión. Luego nos volvimos a encontrar en 2009, por accidente en un parque, ambas fuera de relaciones y abiertas al mundo, así que comenzamos a trabajar juntas con el objetivo de ir a Nueva York. Obtuvimos algo de dinero de su comunidad natal para hacer un documental sobre la emigración de Kvinesdal a Brooklyn en los años 50. En esta película, su papel como narradora se volvió cada vez más ficticia, o en realidad como Gritt ¡estábamos muy nerviosas cuando la mostramos en el cine local después! Pero parecían complacidos, por lo que fue una victoria. Birgitte también es lilithista y yo soy una orgullosa madrina de su hijo, así que estamos unidas. Creo que ninguna de nosotras puede dejar ir a Gritt, es como si ella viviera en algún lugar ahora, esperando a que la encontremos. ¡Creo que con los tiempos apocalípticos en los que estamos ya es horade encontrarla! También hemos hablado de querer verla vieja. Así que sí, ¡es probable que vuelva a aparecer!

A pesar de que las condiciones no son las ideales, al haberse convertido en un festival online, ¿qué sensaciones te deja el estreno de Gritt en un festival tan importante como lo es Rotterdam?

Estoy extremadamente feliz de que el IFFR eligiera tener a Gritt a bordo, y tan humilde de estar en la Competencia Tiger. Es un gran shock para mí porque estoy asombrada por la valentía de su programación y su enfoque en el lado más artístico de la industria. Retrett se estrenó en el IFFR en 2017, donde pude ver algunas de las películas contemporáneas más intrigantes e increíbles que he visto. Podemos hacer mucho con este medio fuera de las convenciones de la narración clásica, pero me temo que nos volvemos cada vez más perezosos como audiencia con Netflix, que es extremadamente accesible. Creo que debemos ser desafiados y desconcertados, no solo entretenidos. Y para eso nos enfrentamos a un gran desafío. ¿Cómo podemos crear experiencias online dignas de películas más complicadas? ¿Películas que seguramente serían más fáciles de ver en un cine, sin distracciones? O; ¿Debemos poner nuestra esperanza en el movimiento del cine independiente, que sobrevivirá y surgirá después del COVID como los templos de experiencias en expansión que puedan ser?

¿Te encontrás trabajando en otros proyectos? 

He escrito un guión sobre dos hermanastras extrañas; la artista de performance nihilista y ninfómana radicada en Berlín y la maestra de escuela infantil 10 años mayor en negación, que creció en un resort en Gran Canaria donde su madre maníaca era anfitriona de Star Tour. Ellas se reencuentran cuando la madre muere en un accidente al instalar un dispositivo de spa esoterico en un centro de retiro para mujeres en las montañas. A partir de ahí pasan cosas. Es un drama disfrazado de comedia loca y, en algún momento, incluso una película de crímenes. Habrá sexo, muerte y caballos, todo nuevo para mí, cinematográfico. Además, la madre de Gritts vive en Gran Canaria, así que, por lo que sé, ¡podría entrar y hacerse cargo de la película!

Titulo: Gritt

Año: 2021

País: Noruega

Director: Itonje Søimer Guttormsen

Si llegaste hasta acá…
Es porque entendés que el cine es un arte y no un mero entretenimiento, por eso valorás y apoyás que existan otras miradas. Podés apoyar a Revista Caligari adquiriendo alguna de nuestras suscripciones.
SUSCRIBIRME

25% De descuento en suscripción Anual