“Voces del pasado”
Por Fernando Bertucci
La cineasta franco-senegalesa Mati Diop crea una obra fascinante que combina la historia y la fantasía para abordar un tema urgente en el debate contemporáneo: la descolonización de los museos europeos. El documental sigue el regreso de 26 objetos que fueron saqueados por las tropas francesas del Reino de Dahomey, en África Occidental, y devueltos a Cotonou, en Benín, después de más de 130 años. En este viaje de restitución, Diop plantea cuestiones sobre la identidad, la memoria y el poder simbólico de estos artefactos en las culturas africanas y europeas.
El enfoque visual de Diop es austero y contemplativo, lo que otorga a los objetos una presencia casi espiritual. A menudo, la cámara permanece fija en largos planos sin palabras, observando cómo los artefactos son empaquetados, transportados y desempacados, con un cuidado que refleja tanto su valor material como su significado histórico. Este tratamiento cuidadoso es especialmente evidente en los bocios, figuras de madera tallada que representan criaturas híbridas y místicas, como un tiburón con piernas humanas o un hombre-pájaro. Uno de los momentos más impactantes de la película muestra una majestuosa estatua del rey Gezo, de pie, con un brazo levantado en un gesto desafiante, pero atrapada en el blanco estéril de un envoltorio de poliestireno.
Diop parece establecer una comparación visual entre la antigüedad de estos objetos y la frialdad de los museos modernos, lo que genera una sensación de extrañeza y desubicación. El contraste entre la vitalidad de las piezas y la rigidez de su entorno museístico crea una tensión que recorre toda la película. Al igual que los artefactos, Dahomey es una obra híbrida que mezcla el documental con la fantasía, desdibujando las fronteras entre lo real y lo imaginario. En interludios oscuros, una voz en off narra el viaje de los objetos desde la perspectiva de las propias piezas, dando una dimensión casi mágica a su desplazamiento: “Viajé tanto en mi mente… todo es tan extraño, tan alejado de esta tierra que vi en mis sueños”. Este recurso refuerza la conexión espiritual de los objetos con su lugar de origen y nos recuerda su propósito ritual, perdido en las vitrinas de los museos europeos.
Uno de los momentos más reveladores de Dahomey es cuando un grupo de estudiantes benineses discute el significado del retorno de estos artefactos. Algunos consideran la restitución como un paso crucial para la identidad nacional, mientras que otros se muestran más escépticos, señalando el trasfondo político de estos actos. Es un debate que subraya cómo las cicatrices del colonialismo continúan presentes en la vida moderna, y cómo estos objetos históricos se convierten en símbolos de resistencia y poder.
El legado colonial también es palpable en las calles de Cotonou, donde se pueden ver anuncios de productos blanqueadores de piel y una mezcla de modas occidentales y africanas. Diop cierra su película con una toma del océano Atlántico, un eco de su anterior filme Atlantiques, y un recordatorio de las personas y los objetos que cruzaron esas aguas contra su voluntad, muchos de los cuales nunca regresaron. Con Dahomey, Diop no solo crea un homenaje a estos tesoros culturales, sino que nos invita a reflexionar sobre el peso de la historia, el saqueo y la identidad cultural.
Titulo: Dahomey
Año: 2024
País: Francia / Senegal
Director: Mati Diop