Bodegón con fantasmas (2024) de Enrique Buleo

“Costumbrismo espectral”

Por Pablo Gross

Enrique Buleo debuta en el largometraje con Bodegón con fantasmas, una película que se sitúa en la intersección entre la comedia negra y el costumbrismo rural, con una serie de relatos interconectados que tienen como telón de fondo un pequeño pueblo de Cuenca. Desde el inicio, la estructura fragmentada de la película puede despertar ciertas reservas en los espectadores que prefieren una narrativa más cohesiva. Sin embargo, en este caso, el conjunto de historias logra configurar un cuadro que, más allá de lo anecdótico, ofrece una mirada sobre el paso del tiempo, la identidad y el peso de la tradición.

Comparada frecuentemente con Espíritu Sagrado (2021), Bodegón con fantasmas se diferencia por su marcada artificialidad en la puesta en escena y en la composición visual. Cada plano parece cuidadosamente diseñado para formar una imagen determinada, reforzando la sensación de que estamos ante un lienzo cinematográfico. Esta estética pictórica, sumada a su humor absurdo y surrealista, la acerca también a propuestas como Gente en sitios de Juan Cavestany o, en un sentido más clásico, al universo de Amanece, que no es poco de José Luis Cuerda.

Las cinco historias que componen la película—desde el reencuentro de un hombre con su padre fallecido en la noche de Halloween hasta una pareja que finge fenómenos paranormales por motivos económicos—se hilvanan bajo una atmósfera de melancolía y humor negro. Buleo utiliza el folklore manchego y la cotidianidad de un pueblo en declive para hablar, con un tono ligero pero reflexivo, de temas como la fe, la precariedad y la soledad de la vejez. En este sentido, el film logra capturar la idiosincrasia de un mundo que parece desvanecerse y de personajes atrapados entre lo mundano y lo sobrenatural.

El reparto, compuesto por actores de gran trayectoria en papeles secundarios—Consuelo Trujillo, Fernando Sansegundo, Enric Benavent, Nuria Mencía y Pilar Matas—aporta una naturalidad y un carisma que elevan la película. Sus interpretaciones, a menudo contenidas y sutiles, refuerzan la ironía y la ternura de los personajes, logrando que el espectador se involucre en sus pequeñas historias de pérdida y anhelo. Si bien la película destaca por su ingenio y su capacidad para mezclar lo cómico con lo fantástico, también hay momentos en los que su estilo corre el riesgo de sentirse reiterativo. La combinación de humor absurdo con lo espectral no siempre resulta equilibrada, y algunas escenas pueden parecer más un ejercicio de estilo que una exploración narrativa sólida. Aun así, Bodegón con fantasmas consigue sostenerse gracias a su singularidad y su mirada personal sobre un universo muy específico.

Titulo: Bodegón con fantasmas

Año: 2024

País: España

Director: Enrique Buleo