“¿Cómo hacer para robar un banco?”
Por Mercedes Orden.
¿Cómo se hace para robar un banco? ¿cómo es la personalidad de quien lo hace?. “Hasta que me alcanza la memoria siempre quise hacer una película de atracos”, confiesa una voz en off donde el guiño a Henry Hill de Goodfellas (1990) resulta obvio. Una referencia cinéfila que no es inocente dentro de una película donde se toma esta temática del cine como el punto de partida para la investigación que emprende Elías León Siminiani acerca de un caso replicado en todos los medios de comunicación europeos: el de El Flako, El “Robin Hood de Vallecas”, detenido el 26 de agosto de 2013 por sus robos a bancos.
Apuntes para una película de atracos va desde el archivo a lo testimonial; del punto de vista del protagonista al del director -el otro personaje central-. Diferentes recursos se ponen a disposición para plantear un documental peculiar que hace de la heterogeneidad, su estilo. Un blend entre documental y ficción, donde la dramatización es el elemento puesto a disposición para reconstruir las escenas que este verdadero profesional vivió, bosquejar una psicología del personaje, ponerse en su piel e, incluso, en la de su compañera, Mariela.
Un montaje hábil acompaña exhibiendo el modo en que el director comienza a comprometerse cada vez más con la historia: desde el conocimiento del hecho, las primeras comunicaciones con El Flako por carta, las visitas a la cárcel y libros prestados que el atracador devolvía subrayados y con agregados en lápiz -como si fueran una invitación a jugar con una serie de pistas que permitan romper el hielo para comprenderlo-, hasta llegar a conocerse en profundidad, a comparar vidas y compartir momentos, recuerdos y puntos de vista.
Los apuntes de este film se acumulan mientras Siminiani plantea hipotéticas metodologías y planes de cómo sería llevar a cabo el asalto a un banco, de plantear y pensar en profundidad esta acción. La historia personal del “Robin Hood de Vallecas” lo convierte en el personaje perfecto: su padre fue un gran atracador encarcelado por el mismo policía que, muchos años más tarde, lo encarcelaría a él también. De modo que para él, la película es la oportunidad de ser protagonista, quizá una vía de escape a su anterior vida. A su vez, es consciente de que su pequeño hijo algún día será adulto y tendrá que convivir con la historia y con lo que se diga de ella. Entonces una máscara y un apodo se proponen como los modos de abrazarse a una ilusión de anonimato. Es allí donde el director construye su pacto con el espectador, en la realidad planteada con herramientas de la ficción puestas en juego para atestiguar, una vez más, que ambas son indisociables.
Una recopilación de películas de asaltos y una cámara que logra inmiscuirse en lugares incómodos como una prisión, un sótano y las ancantarillas de Madrid, completan esta historia donde los relatos en primera persona se mezclan, las voces se confunden, las miradas se intercambian convirtiendo a la película en un apunte más. Uno prolijo que, por momentos, piensa lo moral y por otros lo olvida, mientras apuesta a diferentes recorridos para abordar el tema. Uno que, a modo de ensayo, llega a un final provisorio, una posibilidad escogida entre otras, ya que finalmente, el proceso es claramente la prioridad de esta historia⚫
Titulo: Apuntes para una película de atracos
Año: 2018
País: España
Director: León Siminiani